viernes, 22 de diciembre de 2017

El Juan Galvets y la luz.

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Juan Galvets el primer hombre en la tierra que vio un bombillo, vivía en una situación caótica de su vida, no conseguía lo suficiente para vivir, así que decidió hablar con su amigo el creador del bombillo, para que lo ayudara a encontrar un camino espiritual a través de la luz eléctrica. Él hombre, le pregunto que para qué? Esto era solo un invento para mejorar la vida en sociedad, no para ser alabado por ella. Pero si él estaba interesado en su poder, esta tenía una medida y se llamaba vatios.
Así que el hombre comenzó a ahorrar para comprar bombillos de todos los vatios, y así lograr una ciudad mejor. Compró 20.000 bombillos de todas formas, colores y tamaños. Tenía bombillos  del tamaño  un ombligo, hasta bombillos del tamaño de un elefante, todos iluminaban de una forma distinta. 
Un bien día decidió, después de haber  cambiado su situación como ahora era rico por su inversión en los bombillos, decidió poner todos estos bombillos en un gran salón y llenarlo de espejos, y empezar a mirarse, quería por fin lograr su meta espiritual. Comenzó a verse sentado en una silla. primero 5 minutos, luego 15, luego 20. Horas, días. Y empezó a sentirse mejor. Empezó a calmarse. Su vida dedicada a la luz eléctrica, transmutó a la luz espiritual. El hombre iluminaba!!!!!!!!!, la gente lo veía y lo adoraba, su luz era grandiosa.

 Así que colocó miles de sillas, e invitó a la gente a que se sentara a mirarse, para lograr así un crecimiento espiritual en la sociedad, la gente empezó a tener mayor relación con ellas mismas, lograban ver sus defectos y lograban aceptarlos, empezaban a curarse, la gente se dio cuenta de que a pesar de haber tenido siempre espejos, nunca los habían utilizado de verdad.

martes, 5 de diciembre de 2017

Y todo el mundo debería aprender a pedir


Un recluso de un centro de sanación estaba harto de estar encerrado y un día decidió escaparse a ver si conseguía fiesta. La primera vez no consiguió nada. La segunda simplemente decidió pasear. La tercera fue más larga, pidió y durmió en la calle.  La tercera ya estaba desesperado por volver a su país así que decidió caminar hasta la playa, pidió y durmió en la calle, pero no logró devolverse. A los días la gente del centro se dio cuenta de que no podían hacer más nada por él y lo devolvieron en avión a su casa.
Después de noches de alucinaciones, demonios y espantos, caídas y recaídas, comenzó a buscar un camino bueno, alguien que lo ayudara a olvidar y a sanar de verdad.  Fue a la iglesia, y no encontró sanación, conoció a un monje budista zen y entro en meditación y allí fue como después de años de práctica se dio cuenta de que no tenía que salir a pedir, para pedir en realidad, y empezó a pedir desde su zafú al universo interno.

Tubos en el mar.

 En una epoca pocos quedaron en la tierra y muchos poderosos crearon tubos en el mar.